BLOGus. Todo lo que quiero lo escribo

Mi blog es mi mente. Mis cosas y mis experiencias. Mis imaginaciones, mis verdades, mis mentiras, mis realidades y mis ficciones.
Mi blog es mi mente.
Escribir es lo mas parecido a soñar, y más en mi caso que nunca recuerdo los sueños, quizá todo lo que escriba está en mi inconsciente y ya fue soñado. No tengo forma de comprobarlo pero me gusta pensarlo así.
Me gusta imaginarme que lo que estoy escribiendo ya fue formulado y formado durante la noche anterior, o quizá en alguna noche en la niñez. Y queda ahí, hasta que alguna noticia, hecho o vivencia me la dispara directamente al blog.
¿Para quién escribo?, no lo tengo muy claro, seguramente es para mi mismo, como una catarsis cultural, barata y masiva. Asomarme al precipicio de la red y dejarme caer para que los demás me recojan –y me lean- es mi paracaídas.
Trato de escribir con sentido, con importancia, y con intención.
Trato de escribir con ganas, con ideas y con confianza.
Trato de escribir lo mejor posible y que me guste leerme.
Trato de aprender de los otros, principalmente de los maestros que ni siquiera pudieron imaginar que algún día existiría Internet, los blogs, las redes sociales y demás artilugios modernos de comunicación.
Porque ahí sí se aprende, leyendo a los de siempre, a los que lucharon por una publicación toda su vida, para comer, porque el hambre para ellos fue una fuerza vital para lograrlo.
Ellos son los importantes, los imprescindibles; nosotros, el resto, con más facilidades y bastante mejor alimentados, hacemos lo que podemos. Eso sí, lo que podemos es nuestra escritura, nuestra pasión y nuestras ilusiones. Ahora es nuestro tiempo.
Aunque quizá mi “ahora” ya lo he soñado.